Conducir en montañas puede ser desafiante debido a las condiciones climáticas que cambian constantemente y la elevada concentración del conductor en las carreteras de montaña. Tienes que aprender varias habilidades de manejo avanzadas para llegar allí y se desaconseja que los conductores novatos conduzcan en montañas hasta que sumen experiencia en un escenario de entrenamiento más seguro. Por otro lado, manejar en montañas puede ser una experiencia inmensamente alegre, con un gran paisaje que rodea al conductor en cada milla del camino. ¡Al seguir estos consejos de seguridad para conducir en montañas no te meterás en problemas!
Preparación
Es importante llevar a cabo una revisión previa a la conducción y asegurarte de que tu vehículo esté en buenas condiciones antes de salir a la carretera. El rendimiento de tu vehículo generalmente disminuye en las montañas, por lo que debes tener la certeza de que todos los sistemas están funcionando bien antes de llegar allí.
Revisa los frenos. Asegúrate de que los frenos estén funcionando antes de afrontar esos largos descensos. Tus frenos tendrán mucho trabajo en las montañas y necesitas saber que estarán a la altura de la exigencia. Si cumples los intervalos de mantenimiento recomendados para tu vehículo deberías estar bien, pero no está de más verificar de nuevo.
Examina las llantas. Tus llantas deben estar infladas con la presión recomendada y deben tener suficiente banda de rodadura. Busca golpes y cortes en todos los neumáticos y asegúrate de tener un repuesto. Las llantas se calentarán en los descensos largos y podrían reventarse. Si notas algo sospechoso en alguna de las ruedas, reemplázala antes de arrancar. Si una llanta explota al conducir en montañas, sigue estos pasos para recuperarte de manera segura.
Verifica el nivel de líquido anticongelante del vehículo. Tu motor trabajará a altas revoluciones la mayor parte del tiempo mientras manejas en las montañas. Esto produce mucho calor y el sistema refrigerante tendrá que amortiguar la situación. Si has tenido problemas con el sistema anticongelante del motor anteriormente, haz que lo revisen.
Limpia el parabrisas para evitar destellos, asegúrate de que todas las luces estén limpias y operacionales, y verifica que los limpiaparabrisas estén funcionando. Esto debe ser parte de tu rutina diaria de comprobación previa a conducir.
Reglas de manejo
Las reglas para conducir en montañas no son tan diferentes de las reglas que debes seguir al manejar en cualquier otra parte, aunque existen algunas leyes adicionales que debes conocer.
Cuando dos vehículos se encuentren en un camino de montaña empinado de un solo carril, el vehículo que viaja cuesta abajo debe ceder el paso al vehículo que viaja cuesta arriba, retrocediendo hasta que el vehículo que va cuesta arriba haya pasado de forma segura. El motivo para eso es que el vehículo que va cuesta abajo tiene un mayor control para dar marcha atrás.
Cuando viajas cuesta abajo y la superficie de la carretera se estrecha, debes detenerte y ceder el paso a los vehículos que viajan en dirección opuesta ANTES de alcanzar el espacio estrecho para que no tengas que poner reversa.
Deja las luces delanteras encendidas cuando manejes en carreteras de montaña. Un buen número de estados, como Chihuahua, requieren explícitamente que tengas las luces encendidas al conducir en montañas, aunque en otros se trata solo de una recomendación. En todo caso, no habrá ningún daño si tienes las luces delanteras encendidas y esto podría ayudarte a evitar una colisión frontal. Asegúrate de usar las luces bajas.
Consejos de seguridad de manejo
Controla tu velocidad. Si hay algo para recordar sobre la conducción en montañas, es esto: no excedas la velocidad en los caminos de montaña, viaja a la velocidad recomendado debajo de ella dependiendo de las condiciones de la carretera. Conducir en montañas pone mucha presión sobre el sistema de frenos del vehículo y su rendimiento disminuye significativamente cuando las pastillas de freno se calientan. Cuando viajas cuesta abajo, necesitas más potencia de frenado para detener el vehículo que cuando transitas al mismo nivel del terreno y es fácil subestimar la distancia de frenado. Además, a grandes alturas, la carretera puede estar cubierta por nieve incluso en el verano, algo inesperado para la mayoría de los conductores.
Comprueba el tráfico detrás de ti con los espejos cuando vayas cuesta abajo. Los vehículos acumulan velocidad hacia abajo en una pendiente, por lo cual si ves un vehículo grande o un camión acercándose a ti demasiado rápido, debes moverte hacia la derecha y darles suficiente espacio para pasar en caso de que sus frenos estén fallando.
Cuando estés estacionado en las montañas, sigue las reglas para el estacionamiento en colinas: gira tus ruedas hacia el centro de la carretera si estás parqueado cuesta arriba y hay una acera. Gira tus ruedas hacia el lado derecho de la carretera cuando estés parqueado cuesta arriba o cuesta abajo sin acera y cuando estés estacionado cuesta abajo pero sí haya acera.
Utiliza el freno de motor. Cuando viajas cuesta abajo puedes usar el freno de motor para reducir la velocidad del vehículo y evitar que los frenos se sobrecalienten y fallen. Frenar con compresión requiere cambiar a una marcha más baja y dejar que el motor lidie con la gravedad. A pesar de lo que muchos conductores novatos piensan, el freno de motor no es solo para los vehículos con transmisión manual, ya que la mayoría de las transmisiones automáticas también tienen marchas bajas. Dependiendo de tu vehículo y la velocidad a la que viajas, puedes usar segunda, tercera o “L” para reducir la velocidad.
Rebasar. En la mayoría de los lugares está prohibido rebasar en montañas, ya que los caminos de montaña tienen un mayor número de curvas y no puedes ver lo suficientemente lejos para un adelantamiento seguro. Cuando estés en un lugar donde es legal rebasar, recuerda que pasar a otro vehículo en una montaña es un poco más complicado que hacerlo en terrenos planos. El rendimiento de tu vehículo disminuye en grandes altitudes y necesitarás más caballos de fuerza para rebasar cuando estés viajando cuesta arriba. Considerando estas cosas, deja más espacio para hacer la maniobra cuando quieras adelantar en montaña.
Toma un descanso. Conducir en montañas es más estresante y requiere de mucha más concentración que la conducción regular, así que es probable que te canses. Haz paradas regulares y descanso lo más que puedas. Un conductor fatigado es un mal conductor.
Si transitas por las montañas en invierno, asegúrate de seguir los pasos requeridos para manejar en invierno de manera segura.