A pesar de ser una de las maniobras de conducción más temidas, el estacionamiento paralelo puede ser sorprendentemente fácil cuando sabes cómo funciona. No se puede negar que el estacionamiento paralelo es más difícil que el estacionamiento en batería y el estacionamiento perpendicular, aunque como todas las cosas, se puede dominar con práctica.
No seas uno de estos conductores que prefieren una hora buscando un espacio que tratar de estacionar en paralelo. Utiliza la guía descrita aquí y podrás ser un experto del estacionamiento en paralelo. La mayoría de los manuales de manejo no explican el estacionamiento paralelo en detalle, así que hemos desglosado la maniobra en una guía paso a paso fácil de seguir.
Estacionamiento paralelo paso a paso
Toma en cuenta que las instrucciones proporcionadas aquí se aplican de forma general. Puede que tengas que ajustar los puntos de referencia dependiendo del tamaño de tu vehículo, cómo se maneja y la situación específica de estacionamiento paralelo.
SIEMPRE practica el estacionamiento paralelo en un estacionamiento vacío antes de intentarlo en la carretera entre vehículos reales. Se pueden colocar conos o banderines a 6 metros de distancia para mostrar dónde estarían los otros automóviles. Cuando puedas estacionar en paralelo en un estacionamiento vacío sin tocar estas marcas, estarás listo para probarlo en una situación real.
- 1
Busca el espacio adecuado.
Asegúrate de elegir un espacio en el que pueda entrar tu vehículo. Toma en cuenta que necesitarás un espacio adicional de maniobra cuando intentes estacionar en paralelo por primera vez. Revisa que no haya señales de “NO ESTACIONARSE” que pudieran hacer que parquear en el lugar elegido sea ilegal. - 2
Señala tu intención de girar.
Utiliza tus luces de estacionamiento para indicar a los otros conductores que has escogido este espacio de estacionamiento. - 3
Detente cuando tu automóvil esté alineado con el vehículo más allá de tu espacio.
El manual de manejo recomienda dejar cuarenta centímetros de espacio, aunque esto suele ser un espacio demasiado grande al estacionar en la derecha. Intenta parar lo más cerca posible del otro vehículo. - 4
Pon tu auto en “reversa” y verifica si hay tráfico.
Al revisar si hay tráfico debes utilizar tus espejos Y voltear tu cabeza hacia atrás para comprobar los puntos ciegos del vehículo. Mantén tus luces de estacionamiento encendidos en toda la maniobra para que los demás conductores sepan que no deben acercarse por detrás. A veces puede ser necesario dejar pasar a un automovilista si no se ha dado cuenta que deseas girar. - 5
Retrocede con precaución.
Empieza a dar marcha atrás solo cuando tengas la certeza de que es seguro hacerlo. - 6
Gira el volante con firmeza hacia la derecha cuando las ruedas traseras hayan pasado la defensa trasera del vehículo adyacente.
Gira el volante completamente hacia la derecha y déjalo en esa posición mientras sigues en reversa. - 7
Sigue hasta que tu vehículo esté en un ángulo de 45 grados en relación con el borde de la acera.
Deberías estar en la posición correcta una vez que las ruedas delanteras estén alineadas con la parte trasera del vehículo frente a ti. Se puede usar el espejo lateral derecho como punto de referencia cuando está alineado a la defensa del vehículo de adelante. En lugares de estacionamiento extremadamente estrechos, los conductores pueden comprobar su posición con las luces delanteras del vehículo que está detrás. Estarás aproximadamente en el ángulo adecuado al ver las dos luces delanteras en el espejo lateral izquierdo. Toma en cuenta que esto no funcionará si el vehículo detrás de ti está demasiado lejos. - 8
Endereza las ruedas y retrocede en línea recta.
Detente cuando el espejo lateral derecho esté alineado con la esquina izquierda del automóvil que tienes adelante. - 9
Gira el volante con firmeza hacia la izquierda.
Sigue en reversa hacia el espacio de estacionamiento pero frena antes de chocar con el vehículo que tienes detrás. - 10
Pon el automóvil en “drive o primera”, endereza y muévete hacia adelante.
Centra el vehículo en el espacio de estacionamiento. Asegúrate de no golpear el borde de la acera y que ninguna parte de tu vehículo sobresalga hacia el carril de tráfico. Intenta dejar un espacio similar entre tu vehículo y los vehículos que tienes delante y detrás.
¡Seguramente te sentirás muy emocionado por haber estacionado en paralelo por primera vez! Si dejarás tu vehículo, asegúrate de no descuidar el debido protocolo. Asegúrate de que el freno de estacionamiento esté activo y sal de tu vehículo con cuidado.
Consejos para estacionar en paralelo
Nuestros consejos para estacionarte en paralelo pueden ayudar a familiarizarte con el estacionamiento paralelo en el menor tiempo posible, garantizando una experiencia sin estrés.
- Empieza por el principio.
No intentes aprender a estacionar en paralelo hasta que manejes los puntos de referencia del automóvil, dar marcha atrás en general, estacionar en ángulo y estacionar en 90 grados. Sin estas habilidades, tendrás muchas dificultades. - Tómate tu tiempo.
Es posible que te sientas apresurado al estacionar en paralelo junto a automóviles reales por primera vez, pero es importante tomarse las cosas con calma. Moverte lentamente te permitirá usar los puntos de referencia con más eficacia y detenerte sin dañar otros vehículos si maniobras incorrectamente. - Pide ayuda si la necesitas.
Si conoces a un conductor con licencia competente en el estacionamiento paralelo, pídele que te acompañe mientras aprendes. - Practica regularmente.
Este es el mejor consejo que recibirás. Aprenderás mucho más rápido intentando el estacionamiento en paralelo que leyendo guías y viendo videos. Cometerás errores… ¡Pero todo esto es parte del proceso! Cada vez que te equivoques estarás un paso más cerca de hacerlo bien.
Como salir del estacionamiento paralelo
Afortunadamente, salir de un espacio de estacionamiento en paralelo es mucho más fácil que entrar. Sin embargo, todavía puede ser un desafío. Sigue estos lineamientos para conducir fuera de un lugar de estacionamiento paralelo:
- 1
Asegúrate de que las ruedas estén rectas.
Retrocede lentamente hacia el vehículo que tienes detrás mientras miras tus espejos y sobre encima del hombro. Ten cuidado de no dar marcha atrás demasiado. - 2
Voltea tu cabeza hacia atrás y usa los espejos para revisar alrededor del vehículo en busca de automovilistas, ciclistas y peatones que se aproximen.
- 3
Señala tu intención de moverte hacia el carril de tráfico activando tu luz direccional y utilizando el espejo retrovisor para prestar atención a los peligros.
- 4
Voltea tu cabeza para mirar por encima del hombro, gira el volante a la izquierda y empieza a manejar hacia adelante cuando sea seguro.
Mira hacia el frente de tu vehículo para asegurarte de que no haya automóviles adelante. - 5
Vuelve a comprobar si hay peligros volteando para mirar por encima del hombro izquierdo.
Conduce hacia adelante e incorpórate al carril de tráfico cuando sea seguro.
