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conducir con nieve o hielo

por manuel

Manejar cuando hay nieve o hielo en las carreteras es extremadamente peligroso. Las tormentas de invierno y fuertes nevadas pueden dejar a los conductores varados en condiciones heladas durante horas antes de que llegue la ayuda. Nunca es recomendable viajar cuando hay nieve o hielo en las carreteras pero a veces no hay manera de evitarlo. Si debes conducir tu automóvil después de una tormenta de nieve o cuando todavía está nevando, asegúrate de limpiar tu vehículo de todo el hielo y la nieve antes de arrancar.

El hielo generalmente es más peligroso que la nieve, ya que es muy difícil de ver. Cuando el agua de la carretera se congela se convierte en “hielo negro”. Los parches de hielo negro pueden tomar por sorpresa a los conductores, ya que se esconden fácilmente en las sombras de los árboles, edificios y otros vehículos estacionados al costado de la vía.

Uno de los principales desafíos que los conductores enfrentan al manejar con nieve es que las marcas de carril podrían estar parcial o completamente cubiertas. Sin marcas viales como orientación, los conductores a menudo se desvían hacia el centro del camino y pasan demasiado cerca de los vehículos que viajan en la dirección opuesta.

Con nieve o hielo en tus llantas se reducirá la tracción de la superficie de la carretera de gran manera, aumentando la distancia que necesitarás para detenerte alrededor de seis segundos, dependiendo de tu velocidad. Es importante tener en cuenta que tus llantas tendrán mejor tracción en una superficie resbaladiza cuando las ruedas delanteras estén girando. Frenar puede parecer la respuesta obvia al meterte en problemas en la nieve o el hielo, aunque dirigir el volante es una forma mucho más efectiva para salir del peligro manteniendo las llantas rodando y aumentando la tracción.

Limpiar el hielo y la nieve del vehículo

Debes limpiar TODA la nieve y el hielo de tu automóvil antes de conducir. La nieve y el hielo pueden desprenderse fácilmente cuando el vehículo está en movimiento y podrían golpear a los peatones u otros automovilistas, causando lesiones o daños a la propiedad. La nieve que permanece en el techo de tu vehículo podría caer al parabrisas y obstaculizar tu vista de la carretera, provocando un accidente.

Detectar las carreteras resbaladizas

La mayoría de los conductores esperan que la calle esté resbaladiza cuando la nieve es visible en el piso. Cuando el hielo se acumula sin nieve, es posible que no te des cuenta de que la carretera está resbaladiza hasta que sea demasiado tarde. Estos consejos te ayudarán a evitar las partes con hielo en la carretera:

  • Incluso si no sientes tanto frío como para que el hielo se forme en la carretera, toma en cuenta es probable que la temperatura sea varios grados más baja a la sombra de edificios y árboles. Si el día es frío y húmedo, el hielo puede acumularse en estos lugares oscuros. Atraviesa allí a velocidad reducida con cuidado adicional.
  • Los puentes y los pasos elevados pueden ocultar parches de hielo. El agua tiende a congelarse más rápido en estos lugares que en el resto de la carretera.
  • Toma en cuenta que “más frío” no necesariamente significa “más resbaladizo”. Las carreteras seguramente estarán más resbaladizas cuando la temperatura en el punto de congelación o apenas por encima y no tanto a temperaturas más bajas.

Manejar con nieve o hielo: consejos de seguridad

Si conduces en áreas nevadas con frecuencia sería prudente llevar cadenas para la nieve en el maletero en caso de que tu vehículo quede atascado. ¡Asegúrate de saber cómo colocar las cadenas antes de que llegue el momento de utilizarlas! Los consejos de seguridad que se incluyen a continuación te ayudarán a mantenerte seguro al manejar en condiciones de nieve o hielo. Recuerda que debes darte más tiempo para completar tu viaje y empacar provisiones de emergencia por si te quedas varado.

Cuando está nevando tu visibilidad se reducirá considerablemente. Es posible que no puedas ver con claridad a los demás usuarios de carretera, el camino adelante, los peligros y las marcas viales. Por lo tanto, debes hacer lo siguiente:

  1. Mantener limpias tus ventanas y tu parabrisas para maximizar la visibilidad.
  2. Encender las luces bajas, incluso durante el día. No caigas en la tentación de usar las luces altas ya que esto disminuirá tu visibilidad al crear destellos.
  3. Reduce la velocidad y aumenta la distancia de seguimiento. La baja visibilidad te dejará con menos tiempo para reaccionar.

Estos consejos te ayudarán a mantener el control del vehículo cuando la nieve o el hielo hagan que la carretera esté resbaladiza:

  1. Reduce la velocidad y aumenta la distancia de seguimiento.
  2. Al conducir sobre hielo, reduce la velocidad a paso lento.
  3. Disminuye aún más la velocidad cuando te aproximes a curvas e intersecciones. Evita girar y detenerte rápidamente.
  4. Utiliza neumáticos radiales, llantas para la nieve o cadenas. Incluso con este equipo tu vehículo podría deslizarse sobre la nieve o el hielo. Intentar conducir en estas condiciones sin este equipo sería un error.
  5. Evita cambiar de dirección o de velocidad de forma repentina, ya que esto probablemente hará que tu vehículo derrape.

Elegir una velocidad segura

Si bien no existe una velocidad ideal o totalmente segura para viajar con nieve y hielo, una velocidad más baja suele ser mejor. Las condiciones probablemente serán diferentes de un tramo de carretera a otro dependiendo del sol, la sombra, la exposición y qué tan concurrida está la calle o si la carretera tiene sal. Todo lo que puedes hacer es seguir alerta y mantener tus ojos en la carretera adelante en busca de señales que indiquen peligro. Recuerda que las carreteras “oscuras” o de hormigón asfáltico son un territorio principal para el hielo negro escondido.

Frenar en nieve y hielo

Cuando frenes sobre hielo, nieve u otras superficies resbaladizas, no debes hacerlo hasta el punto en el que las ruedas se bloquean. Esto seguramente hará que tu vehículo derrape. En vez de eso, aplica los frenos suave y gradualmente hasta que sientas que las llantas empiezan a agarrarse a la carretera. Si las llantas se bloquean al utilizar los frenos, suelta el pedal hasta que las ruedas se aflojen y vuelve a intentarlo suavemente. Repite el proceso hasta que el vehículo haya alcanzado la velocidad deseada o se detenga completamente.

Vehículos de mantenimiento y emergencias

En condiciones con nieve y hielo puedes encontrar vehiculos de mantenimiento y equipo de trabajo en la carretera. Busca las luces de advertencia intermitentes de color amarillo y azul, prestando atención para ceder el derecho de paso. Ten cuidado adicional a medida que te aproximas.

Cuando veas un vehículo de emergencias como un camión de rescate, una ambulancia o una patrulla de policía brindando ayuda a alguien que está atascado en la nieve o ha sufrido una lesión, reduce la velocidad y muévete a otro carril, de ser posible.

Quitanieves

Ten cuidado cuando conduzcas cerca de quitanieves activos debido a que sus conductores deben lidiar con visibilidad muy limitada atrás y a los costados. Toma en cuenta que los quitanieves deben dar vuelta frecuentemente y es posible que sus conductores no te vean. Mantén siempre una distancia de seguimiento mucho mayor con un quitanieves que con otros vehículos más pequeños. Si te acercas demasiado, la sal, líquidos anticongelantes y perdigones contra derrapes distribuidos por el quitanieves podrían causar daños a tu vehículo.

Los quitanieves suelen tener palas laterales que sobresalen del vehículo a ambos lados. Es posible que la nieve que cae o la oscuridad de la noche eviten que los usuarios de carretera detecten las palas quitanieves, lo que aumenta el riesgo de colisiones laterales si intentan pasar muy de cerca. Mantente seguro y no intentes rebasar a un quitanieves por ninguno de los lados.

En una tormenta de nieve, los quitanieves pueden ser prácticamente invisibles ya que su velocidad y tamaño crean grandes nubes de nieve que pueden soplar alrededor del vehículo, ocultandolo. Presta atención en busca de quitanieves y mantén tu velocidad al mínimo.

Preparación para conducir en clima de frío extremo

Tu vehículo necesitará estar en excelentes condiciones y listo para el invierno para afrontar la conducción en un clima extremadamente frío.

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    Asegúrate de agregar líquido anticongelante al agua de tu radiador antes de viajar en un clima de frío extremo. De lo contrario, el agua del radiador se podría congelar y hacer que el motor del vehículo se sobrecaliente. Cuando enciendas el motor, mira el medidor de temperatura en busca de señales de sobrecalentamiento.

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    La niebla y humedad que se acumulan dentro de las ventanas y el parabrisas causarán una baja visibilidad en condiciones de mucho frío. Puedes combatir esto usando el descongelador y teniendo una o dos ventanas ligeramente abiertas para que la humedad se vaya.

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    Cuando las temperaturas caen sustancialmente por debajo de cero, la gasolina en las líneas de combustible y el tanque podría congelarse. Asegúrate de que el tanque esté lleno al menos a la mitad para minimizar el riesgo de esto ocurra.

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    Comprueba que todas las luces estén limpias y funcionando por completo antes de emprender tu viaje. La suciedad en las luces delanteras reducirá su efectividad hasta en un 90%.

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    Encender tu automóvil en un clima extremadamente frío requiere de una batería totalmente cargada. Revisa tu batería y reemplázala si es necesario.